Sentarse en sus mesas y resistir a su «Fusilli al fierrito Don Corleone» o a su «Seduzione di cioccolato» resultaba un pecado. Y si bien la escena gastronómica de Buenos Aires mutó, La Parolaccia se ha vuelto un ícono de la gastronomía local, donde la excelencia y la fidelidad a los sabores típicos de la cocina italiana, se hacen presentes en cada uno de sus platos.
El primer local inauguró en Barrio Norte hace tres décadas. Irrumpieron con una propuesta innovadora, además de una esmerada atención a sus comensales. Más de uno habrá sido protagonista de un entonado «tantti auguri’ interpretado por los mozos del lugar.
Luego el éxito se replicó en los locales de Recoleta, Palermo, Puerto Madero, Madero Downtown, Belgrano, San Isidro y Pilar, siendo hoy un ícono ineludible en Buenos Aires de la auténtica cocina italiana y mediterránea.
En sus salones predominan la madera y el cuero
Cada una de las sucursales mantiene la misma estética elegante y sobria. Amplias mesas con manteles blancos, sillas revestidas en cuero rojo y boxes que permiten más privacidad e invitan al encuentro de familias, amigos, de parejas o de ejecutivos.
La Parolaccia, un referente al que se lo distingue por sus pastas artesanales elaboradas en el local, por sus preparaciones frescas, y por ser un spot ideal para quienes buscan una experiencia de placer gastronómico para todos los días.
Cosa mangiamo?
Pastas, artesanales y frescas
La experiencia inicia tan sólo con leer la carta en lengua italiana, aunque traducida al español pues hace 30 años no era tan común poder googlear el menú.
Allí se propone un recorrido completo por la bota europea, con gran variedad de platos que incluyen opciones veganas, vegetarianas y sin gluten.
Tanto para el almuerzo como para la cena, ofrecen el menú Parolacho, que incluye entrada, principal, postre y bebida por un precio fijo de $29 500. Vigente todos los días de la semana. Bebidas: aperitivo de bienvenida, agua o gaseosa por persona, vino D.V. Catena de 750 ml. cada dos personas; café o té con petits fours y copa de limoncello.
En su sección de Antipasti resalta el clásico de la casa que incluye jamón crudo, bocconcini de mozzarella, tomates secos, gruyere, spianata, morrón, alcaucil, oliva ascolana y mortadela con pistachos, una opción que se presenta para compartir entre dos personas.
También se puede optar por la burrata con prosciutto, carpaccio di manzo gluten free (preparación de carne cruda, aderezo tradicional, rúcula y parmesano) o la melanzane alla parmigiana (berenjenas gratinadas con parmesano y pomodoro fresco).
Disponen de una sección de Insalate (ensaladas) con presentaciones frescas y variedad de sabores. La sugerida: rúcula, peras, queso camembert gratinado, almendras y vinagreta de mostaza y miel.
Los sabores de tierra y mar se hacen presentes con una variedad de opciones y combinaciones. Carne, pollo y pescado en exquisitas preparaciones. Además, resalta los risottos a base de productos de mar.
En cuanto a las pastas, son el alma de La Parolaccia. Elaboradas de forma artesanal con ingredientes 100 % italianos. Uno de los platos insignia es el spaghetti ql frutti di mare, con almejas, langostinos, calamar, vieiras, chipirones y mejillones.
También destacan los sorrentinos Gran Caruso rellenos de mozzarella y jamón cocido, los gnocchi soufflé de espinaca gratinados con ave, crema, champignon, pesto, parmesano y jamón cocido o fusilli al fierrito Don Corleone (aptos para personas veganas) con oliva, ajo, aceitunas negras, alcaparras y pomodoro fresco.
Algunos de sus platos están disponibles para el servicio de take away y delivery. Además, a través de su tienda online se pueden adquirir gift cards para obsequiar lo mejor de la gastronomía mediterránea.
Para el momento dulce, los más golosos irán directo a disfrutar de seduzione di cioccolato, un volcán de chocolate con helado de crema. También se lucen el flan de claras con confitura de naranja, yogurt de vainilla, pasas y almendras. Y, si de sabores italianos hablamos, habrá espacio para el clásico tiramisú al mascarpone.
Como final de banquete, se podrá disfrutar de algunas infusiones o de un gran café de grano tostado italiano, Cabrales, acompañados con petit four artesanal.
Además de bebidas tradicionales sin alcohol, cuentan con una amplia carta de vinos para maridar los platos, y algunas etiquetas pueden degustarse por copa. La propuesta también incluye coctelería clásica y de autor para disfrutar en sus tardes de “buon aperitivo”.
+info: www.laparolaccia.com
